esta vez sí se cumplió eso de “a entrenador nuevo, victoria segura”. Antonio Rivas volvía esta semana a hacerse cargo del Atlético B, y vivió un reestreno feliz. El filial colchonero sumó una necesitadísima victoria, en su objetivo de no caer a Tercera división.
El nuevo preparador del filial modificó el sistema de cinco atrás que venía utilizando Nacho Fernández. Aunque a la hora de defender Ricard en ocasiones se incorporaba como quinto hombre, lo cierto fue el técnico de Alcázar apostó por el otrora clásico 4-4-2, con Mario al frente del ataque. Idéntico sistema utilizó Javi Sánchez en el Villarrubia.
De inicio saltó mejor el cuadro local. Con más intención y más balón, los blanquiazules dominaban la situación, aunque sin crear peligro. Los ciudarrealeños tenían más intención, pero resultaban muy previsibles, y el Atlético B lejos de sufrir, parecía cómodo. Es más, al contragolpe Mario pudo adelantar al filial en los primeros minutos, a servicio de Toni Moya; topándose con Xabi Irureta. Y el propio Toni Moya intentó el gol de la jornada, buscando el olímpico, encontrándose de nuevo con el ex del Sanse.
En líneas generales, en el partido pasaban pocas cosas. Ambos equipos demostraron el por qué luchan por el descenso, algo que también pareció atenazarles. De hecho, aunque el filial se adelantó mediado el primer acto, y pudo matar el partido poco después, realmente fueron dos jugadas aisladas; las únicas a destacar en lo que quedaba del primer tiempo.
En el ecuador de la primera mitad, lograron el primer tanto los rojiblancos. Ricard le ganó una disputa a Álex Jiménez por el perfil diestro, y ganó la línea de fondo. Desde allí puso el balón al primer palo, donde apareció Mario para rematar desde el pico del área chica, sin dejarla caer, para hacer el 0-1.
Dado el buen inicio de partido, se esperaba una reacción del Villarrubia que no llegó. El partido continuaba siendo un pan sin sal, hasta que diez minutos del primer gol, pudo sentenciar el cuadro madrileño el choque. Fran Minaya derribó dentro del área a Camús, decretando sin dudarlo Lax Franco penalti. La responsabilidad de lanzar la pena máxima la asumió Camello, que mandó el balón a las nubes. Un fallo que pudo marcar el devenir del partido, aunque realmente la acción que lo marcó vino cuatro minutos después. Fran Minaya veía la segunda cartulina amarilla, y tras veinte minutos en el campo (entró sustituyendo a David Herrera), tuvo que abandonarlo; en la que fue la última acción reseñable del primer tiempo.
El segundo comenzó con novedades. El técnico local introdujo un triple cambio, cambiando un hombre por línea, pero sin modificar su esquema. Antonio Rivas también introdujo un cambio, retirando a su único hombre amonestado, el juvenil Serrano, dando entrada a Calavera.
El triple cambio le sentó bien al equipo blanquiazul, que volvió a dominar la situación. El equipo de Javi Sánchez volvió a gustarse con el balón, y tuvo un control superior al del primer tiempo, pero con el mismo fruto: nada. San Román seguía siendo un mero espectador, porque aunque el cuadro ciudarrealeño ganó metros sobre el césped, su área parecía territorio prohibido.
Es más, con espacios, a la contra el Atlético B creó peligro y mucho. Sobre todo, y en contra de lo que pudiera parecer entre un filial y un equipo veterano, los rojiblancos forzaron errores del contrario para crear peligro (y mucho). Así, Toni Moya (por dos veces), Ismael y Giuliano tuvieron la sentencia antes de la media hora. Estas acciones comenzaron a desesperar a un Villarrubia, que comenzó a deshacerse entre faltas y protestas, sin crear peligro alguno.
Al final fue tanto el cántaro a la fuente, que de nuevo en el ecuador del periodo, llegó la sentencia colchonera. Toni Moya remató desde la frontal del área, despejando cerca de la escuadra Xabi Irureta, mandando el balón a córner. Ese córner, lo ejecutó de nuevo Toni Moya, que centró al primer palo. Por allí estaba Forcen, que con la testa, cruzó el balón al segundo palo, para sentenciar el choque.
Con dos goles por delante en el marcador, favorable al filial rojiblanco, el partido murió. El Villarrubia era un quiero y no puedo, ante un Atlético B al que le interesaba que no pasaran cosas en el partido. El ritmo de los de Antonio Rivas decayó, y se centraron más en tener más el esférico, no cometer apuros y evitar sustos, que en buscar el tercero. Y como quiera que el equipo local no inquietó a la defensa madrileña en todo el partido, el choque finalizó como estaba.
De este modo, el Atlético B sumó sus tres primeros puntos en la Segunda Fase, vitales en la lucha por evitar el descenso. Tanto, que los colchoneros superan en la tabla a su rival de este sábado.
VILLARRUBIA | Xabi Irureta; David Herrera (Fran Minaya 16’) (AA 37’), Martínez, Cabezuelo, Carlos García (A); Toni Seoane, Arroyo (Colinas 46’), Álex Jiménez (A), Iván Bueno (Ayoub 60’) (A); Hakim (Beltrán 46’) y Berrocal (Grillo 46’) (A). |
ATLÉTICO B |
San Román; Camús (Davo 77’), Moreno, Álvaro García (A) (Rojas 84’) Medrano (A); Ricard, Toni Moya, Ismael (Forcen 58’) (A), Serrano (A) (Calavera 46’); Mario Soriano y Camello (Giuliano Simeone 58’). |
GOLES | 0-1 Mario Soriano (23’); 0-2 Forcén (68’). |
ÁRBITRO | Lax Franco, colegio murciano. |
INCIDENCIAS | Nuevo Campo de Villarrubia, unos 1.000 espectadores. |
Los Importantes 2020/2021 | |||||
ATLÉTICO B |
|||||
3. | Toni Moya | ||||
2. | Mario | ||||
1. | Giuliano | ||||
E: | Antonio Rivas | 2 |