El Móstoles URJC, campeón de la Copa RFFM y clasificado a la fase nacional de la Copa RFEF

añana redonda para el CD Móstoles URJC, que revalida el título de la Copa RFFM y que repite presencia en la Copa RFEF como campeón de la fase autonómica de la Comunidad de Madrid. Los mostoleños se impusieron al Rayo Vallecano “B” (en la tanda de penaltis) en el duelo que decidía el vencedor de la competición que sirve como aperitivo para el inicio de la Tercera División, mientras que derrotaron al Sanse en el tiempo reglamentario, con un gol de Óscar Rivas en el minuto 44, y recibirán este fin de semana en El Soto a Unionistas, en los dieciseisavos del torneo que otorga las últimas cuatro plazas para la Copa del Rey.

No fue un triangular muy vistoso, porque todos los goles llegaron en acciones a balón parado: los nueve penaltis que proclamaron campeón a los de Víctor González en el primer encuentro, el tanto de Franck Fomeyem para los sanseros contra el Rayo “B” en el rechace de un córner y el decisivo de Óscar Rivas para el Móstoles URJC frente al conjunto de Matapiñonera en un perfecto testarazo ante el que nada pudo hacer Felipe Ramos.

El filial franjirrojo se volvió a quedar a las puertas del título de la Copa RFFM, esta vez disputada en 45 minutos. Así como los vallecanos solo saben ganar en la fase de grupos, donde suman 27 puntos de otros tantos posibles contando las tres ediciones, la final se le resiste al elenco actualmente entrenado por Ángel Dongil. El Alcorcón “B”, en los penaltis, y el Móstoles URJC por dos veces, esta última desde el punto fatídico, han sido sus verdugos.

En esta ocasión, el Rayo hizo méritos suficientes para ganar el partido sin recurrir a los lanzamientos desde los once metros, que, de todos modos, se habrían lanzado para dilucidar posibles desempates en lo referente a la Copa RFEF. Marc Echarri, Cano y Álvaro Aguirre dispusieron de las opciones más claras, pero Nando en las dos primeras y la mala puntería del ‘7’, que lo hizo todo bien menos la finalización, les privaron de adelantarse en el marcador. Fue el propio extremo derecho el autor del único penalti que no acabó en el fondo de la red. Nando acertó la dirección del que fue el último lanzamiento de la tanda, en un desempate que sonrió a los de El Soto por 4-5.

El segundo encuentro midió al Rayo “B” y a la UD San Sebastián de los Reyes, único equipo madrileño de Segunda “B” que no tenía plaza en Copa del Rey ni Copa RFEF, de ahí su participación en la fase autonómica. Para los vallecanos se trataba de un encuentro de preparación, porque, por su condición de equipo “B” y por el hecho de que la competición ahora da billete a la Copa del Rey, no podía acceder a la fase nacional. Aun así, los de Dongil plantaron cara y dificultaron la tarea a los sanseros, que solo desequilibraron la balanza por medio del camerunés Fomeyem, que recogió un balón muerto en el área tras un saque de esquina.

Rubén de Tomás y Fer Ruiz, que actuó de lateral derecho, hicieron trabajar a Luis del Ramo todavía con 0-0 en el electrónico. Lo mismo ocurrió con Filip Manojlović a la media de hora de juego, que estuvo atento para mandar a córner un remate peligroso de Dani Rueda. El serbio, ex del Getafe, a excepción de esa oportunidad, prácticamente pasó desapercibido, por la solidez defensiva sansera pese a la dupla de centrales muy joven (Felix – Fomeyem, de 20 años cada uno) y por la poca mordiente de los franjirrojos, en cuyo once había futbolistas menos experimentados y recién subidos del Juvenil “A”, como Daniel Barroso y Aitor Villar.

Con la victoria del Sanse, las cuentas eran sencillas de cara al tercer y último duelo. Quien lograse el triunfo en el Sanse – Móstoles URJC, se clasificaba para la fase nacional de la Copa RFEF. El empate solo le valía a los de Marcos Jiménez. Y fueron los mostoleños los vencedores, no sin polémica, porque el cuadro de Segunda “B” reclamó al árbitro, Luis Alonso Campos, una falta de Recalde sobre Felix en la jugada que originó el córner del gol de Óscar Rivas. El central, que disputaba su segundo partido oficial después de la grave lesión sufrida en noviembre de 2019, conectó un testarazo inapelable que desató la locura en las filas azulonas.

Anteriormente, hubo ocasiones para uno y otro conjunto. Más claras, seguramente, a favor del San Sebastián de los Reyes, que tuvo en la testa y pies de Arturo y en las botas de Carlitos la opción de ponerse por delante, un gol que habría obligado al Móstoles URJC a marcar dos. Los de Víctor González ofrecieron mejores sensaciones que frente al Rayo y fueron a más con el paso de los minutos.

Concretamente, en los últimos veinte, Felipe Ramos intervino a un tiro de Mario Rivas y a un testarazo de Mario Rojo, que entró en lugar de Galo y trató de encarar en cada acción a su par. Al final, la urgencia del resultado obligó al técnico mostoleño a recurrir al ‘plan B’, con el central Recalde como nueve y con Óscar Rivas en el campo. Acumuló centímetros sobre el verde y dio sus frutos con la diana de Óscar Rivas que proclamó campeón de una improvisada fase autonómica de la Copa RFEF al CD Móstoles URJC, que se medirá este fin de semana a Unionistas de Salamanca en los dieciseisavos. En total, tres eliminatorias (la segunda de ellas sería en Bouzas o Melilla) tendrán que superar para disputar la Copa del Rey 2020/21.