ALCALÁ 0-1 SAN FERNANDO | La maldición del ex…. ¡Y otra vez sin linier!

si ya es raro que un partido acabe sin uno de los dos linieres por lesión, más raro aún es que le pase al mismo equipo dos partidos consecutivos. Y curiosamente, ante dos equipos de Alcalá de Henares; puesto que si el San Fernando el pasado domingo jugó todo el segundo tiempo contra el Complutense sin linier; éste domingo le tocó frente a la RSD Alcalá. Y para colmo de males blanquillos, en los dos partidos le tocó defender todo el segundo tiempo en la mitad de campo en la que no hay árbitro asistente. De película.

Anécdotas arbitrales aparte en esta atípica temporada, lo más reseñable para el San Fernando es que volvió a ganar tras nueve partidos (once jornadas) sin hacerlo. Curiosamente, el último partido que habían vencido los del Santiago del Pino fue ante el Alcalá, en el primer partido sin Pablo López Salgado. Desde entonces, muchos cambios y pocos puntos para un equipo al que se le estaba comenzando a complicar y mucho la temporada. Enfrente, la RSD Alcalá volvió a desperdiciar la oportunidad de acercarse a los puestos cabeceros, con otro mal partido.

En lo puramente futbolístico, el choque dejó mucho que desear. Ninguno de los dos equipos logró darle continuidad y fluidez al juego. Los rojillos tenían más el balón, pero de manera estéril. Es más, aunque tenían menos el cuero, los hombres de García Granero saltaron mejor al césped, profundizando en torno a la portería de Aarón. Incluso se toparon con el larguero, en un lanzamiento de córner en el que Alexis Cedillo buscó el gol olímpico. También las tuvieron Hugo y Diego Campos (la de este último el efecto óptico le hizo celebrar a más de uno el gol), en un buen inicio de partido de los forasteros, que rara vez se marchan sin puntuar de El Val año tras año.

Cumplida la hora de partido, concretamente en el minuto treinta y dos llegarían las dos acciones que condicionarían el resto del partido. En un buen balón en profundidad, Álex Fernández se plantó solo ante Nacho Gil, que salió de su portería sin salir del área. Portero y delantero chocaron, pareciendo claro el derribo del meta sobre el killer rojillo. Sin embargo, Ferreiro Méndez entendió que el delantero complutense fingió siendo amonestado. En esa acción, no pudo contar con la ayuda de Consuegra Merino, puesto que aunque era en su banda, no pudo seguirla debidamente al caer lesionado. Medico y fisio locales saltaron a atender al asistente, que en todo momento indicó que no podía continuar. Tras hacerse un llamamiento por megafonía por si había algún otro árbitro presente en el encuentro y no aparecer, se reanudó el juego doce minutos después; teniéndose que cambiar de banda Calvo Cuenca, para cubrir la banda de los banquillos.

El parón cortó el ritmo de un partido que ya de por sí no tenía mucho, aunque el San Fernando cada vez que se asomaba por el área rival, lo hacía con peligro. Hugo tuvo otras dos, mientras que por el Alcalá tan solo creó peligro real Durán en una falta directa.

Al final tanto fue el cántaro a la fuente, que a tres minutos para el descanso, se vio el que a la postre acabó siendo el único tanto del partido. Y fue un alcalaíno, y ex de la RSD Alcalá, el que adelantara a los visitantes. David López desde fuera del área, logró un buen gol con un gran disparo cruzado, ajustadísimo al palo desde fuera del área, a donde no pudo llegar Aarón; en lo que fue lo último a reseñar del primer tiempo.

El segundo acto comenzó con un doble cambio en las filas locales. Unos discretos Shafa y Malote dejaron su sitio al recién fichado Garci y Pancorbo, sin alterar el 4-1-3-2 de Jorge Martín de San Pablo. Las novedades vinieron en el cambio de cromos, puesto que Izan pasó de la banda diestra a la zurda; para que Garci entrara por su banda natural. Arriba, Pancorbo formó dupla de nueves con Álex Fernández, retrasando su posición hasta la mediapunta Nanclares.

La doble sustitución era toda una declaración de intenciones de Jorge Martín de San Pablo, que poco después introdujo a Huelves por Murci, buscando más mordiente y profundidad en su lateral derecho. Sin embargo, se quedó todo en eso, puesto que aunque los rojillos se volcaron y jugaron en campo rival, de nada les sirvió. Las prisas, los nervios y la precipitación se adueñaron de los jugadores complutenses, que eran un quiero y no puedo. Más corazón e intención que fútbol y cabeza. Y aunque Pancorbo se hinchó a bajar balones, los alcalaínos sacaron muy poco rédito.
Enfrente, el San Fernando parecía tranquilo. Sin meterse atrás como gritaba su entrenador, pero sabiendo que tenían que proteger su valioso botín, y sobre todo impedir que los rojillos cogieran ritmo y comenzaran a bombardearles. Del área contraria no querían saber apenas nada (de hecho en el único córner que botaron en la segunda mitad tan solo subió a rematar un futbolista al área), sabiendo que ya poco tenían que ganar (salvo tranquilidad) y si mucho que perder.

Evidentemente, y aunque no era su tarde y no le salían las cosas al Alcalá, dado el desarrollo de partido tuvieron alguna ocasión clara para marcar. La que más, un remate de Pancorbo de cabeza tras un saque de esquina al segundo palo, que sacaron entre Nacho Gil y el palo. El meta también tuvo que atrapar un disparo de Rafael a la salida de un córner. El resto (tampoco muchas) se les fueron directamente fuera a los locales; mientras que Aarón solo tenía que intervenir para sacar de puerta, o alguna falta o fuera de juego.

De este modo, el San Fernando rompió su mala dinámica de los últimos meses, a pesar de que desde su llegada al banquillo, García Granero no conoce la derrota, lo que le ayuda a ver la luz al final del túnel. Además los blanquillos ganaron su primer partido a domicilio de toda la temporada. Todo lo contrario que un Alcalá que no termina de carburar, y que deja atrás su racha de seis partidos sin perder.