TRES CANTOS 1-0 ALCALÁ | Miércoles, día de fiesta en Foresta

en un mundo lleno de manías y supersticiones como es el mundo de fútbol, no puede pasar desapercibido que en la segunda jornada intersemanal (de las siete que hay programadas), el Tres Cantos consigue su segunda victoria de la temporada. La primera (y única hasta la fecha) allá por la tercera jornada en el mes de Septiembre, también la consiguieron en un partido disputado en miércoles.

Más allá de la anécdota, Tres Cantos y Alcalá disputaron un partido que no quedará en la memoria de los allí presentes, al menos para bien. Para más inri, el partido se decidió con un tempranero autogol de los visitantes.

Seguramente debido a su mayor necesidad de puntos, los locales jugaron con un punto más intensidad. Desde el inicio se vio más metidos a los de Chema Hidalgo, en un partido que no tenía mucho ritmo de inicio. Apenas había pasado nada sobre el césped, cuando llegó el que a la postre acabaría siendo el único tanto del partido. Tras una falta lateral, el balón le cayó a De Prada. El cosladeño remató a portería, introduciéndose el balón en su propia portería Jose Ángel, que en el intento de despeje, desvió la trayectoria del balón sin que nada pudiera hacer Degre por evitarlo.

Por delante en el marcador, el Tres Cantos subió de revoluciones, y tuvo el segundo en las botas de Adri Bravo, que vio como su remate se marchaba por muy poquito. El Alcalá andaba desaparecido por el campo, hasta que mediado el primer tiempo Izan se echó el equipo a su espalda. El ocho rojillo copaba todas las acciones de peligro, ya fuera rematando (rozó el gol en dos ocasiones), o asistiendo, en una falta que remató Álex Fernández que se marchó por poco. Todo pinceladas muy sueltas de los alcalaínos, que aunque se hicieron con el control del balón, eran totalmente inofensivos. El buen hacer del Tres Cantos en todas sus líneas, impedía el avance correcto de los visitantes con el balón. Y al contragolpe, los blanco y morados lograban crear superioridad, pero erraban en el último pase, sin dar tampoco muestras de peligro.

Y fue así prácticamente la totalidad del partido. Un Alcalá apático, sin ideas, con más balón, pero sin dar sensación real de peligro, ante un Tres Cantos que mordía en cada acción. Dada su situación clasificatoria (arrancaban la jornada colistas), los de Chema Hidalgo sabían que tenían más que perder que qué ganar si buscaban el segundo. Con una buena presión en bloque medio les bastaba a los tricantinos para evitar peligro, buscando solo salir al contragolpe. Brindar una batalla por el balón podía suponer una guerra que tenían papeletas de perder ante un equipo tocón, por lo que tocaba ponerse mono de trabajo.

Y les salió muy bien a los locales, porque tuvieron muy claro como hacerlo. Cometiendo los jugadores vestidos de blanco pocos errores, los intentos (en arreones) de los visitantes quedaban anulados. Aunque los cervantinos tuvieron alguna acción aislada para marcar, lo cierto fue que tan solo una vez Carlos Paredes tuvo que intervenir para evitar un tanto, en un gran disparo de Izan. El resto fueron intentonas que o bien acababan con el balón a las nubes, o bien despejaba la atentísima zaga local. Aunque la más clara, sin duda, fue para los locales, cuando a la media hora del segundo tiempo, Dani Barroso vio adelantado a Degre. El centrocampista tricantino no se lo pensó, y desde el centro del campo remató buscando el gol de la jornada. Y apunto estuvo de conseguirlo el veinte local, puesto que aunque a Degre le dio tiempo a rectificar su posición, lo cierto fue el que guardameta tuvo que apurar hasta el último instante para poder atrapar el balón sobre la línea de gol.

De este modo, el Tres Cantos rompió su mala racha de ocho jornadas sin ganar, lo que le permite abandonar la última posición de la tabla, aunque sea por aquello del gol averaje. Por su parte, el Alcalá acumuló su quinta jornada consecutiva sin ganar, quedándose a tres puntos de los puestos de play off.