RSC INTERNATIONAL 5-0 GALAPAGAR | Monólogo local

Y aunque ambos calcaron sobre el papel prácticamente su sistema de juego, con 3 centrales y dos carrileros, lo cierto es que las apuestas eran totalmente diferentes. Mientras Luis García buscaba mayor profundidad por ambos costados del ataque, Jaime Juanas los replegaba a la hora de defender para posteriormente salir con ellos en velocidad al contraataque. Pero poco a poco, fue imponiéndose el ritmo de partido que querían los locales. Tan clara fue su voluntad de ataque, que de vez en cuando Ferrán se asomaba cerca del área rival para sumar aún más efectivos arribas. Así que a los visitantes solo les quedaba la opción de aguantar el chaparrón mientras veía cómo su oponente asediaba sin piedad su portería. Pudieron adelantarse los locales en el minuto 22, cuando un fallo de Gonzalo Sanz (que había sostenido a su equipo con dos buenas intervenciones previas), sirvió a Esteban un mano a mano que el guardameta supo enmendarse de su error. Pero a partir del minuto 32, esta vez sí Esteban no fallaba en un rechace dentro del área y lograba adelantar a su equipo en el marcador. Desde ese instante, se abrió la puerta al resto de goles antes del descanso: primero Víctor en el 39 y después Bruno Iglesias en el 42 para mandar el encuentro con 3-0 al descanso y la sensación de que se daba prácticamente por finiquitado.

Podría haber cambiado el guión a los dos minutos de la reanudación: Asencio toca el balón con la mano y los visitantes pueden recortar diferencias. Al lanzamiento del penalti, Rubén Darío estrella el balón en el larguero. generando además una contra que el RSC no aprovechó para haber aumentado su renta. Aún así, poco a poco volvieron al ritmo de la primera mitad, con un Galapagar que trataba de ofrecer una buena imagen, hasta que finalmente en el minuto 58, un derribo a Bruno Iglesias dentro del área lo transforma él mismo, quien no falla desde los 11 metros. Trató Luis García de dar bastantes minutos a sus jugadores de banquillo, y uno de ellos, Aitor Mañas, de una magnífica jugada personal, lograría el quinto tanto para los locales en una buena jugada personal, rematada además en segunda instancia. No contento con eso, Aitor Mañas seguiría insistiendo en ataque una y otra vez, generando todo el peligro ofensivo del filial.

Aunque no se bajó del carro por intentar conseguir más goles, el paso de los minutos, y un marcador tan sumamente amplio, fue dejando un partido cada vez menos entretenido y con menos revoluciones de las esperadas. La presión alta en salida del balón que había mantenido en todo momento el RSC, dificultando el juego del Galapagar, se mantuvo hasta prácticamente el último minuto del encuentro, cuando el colegiado decretó el final del mismo. El filial suma una victoria más en su casillero, manteniendo la segunda posición, mientras los serranos esperarán una mejor oportunidad para seguir fuera de los puestos de descenso, objetivo que a día de hoy siguen cumpliendo.