RM CASTILLA 2-1 GIMNÁSTIC | El Di Stéfano es un fortín

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l choque enfrentaba a dos equipos con dinámicas completamente distinta, los blancos llegaban con una sola victoria en los tres partidos anteriores, mientras que los visitantes con dos triunfos y un empate.
Ambos conjuntos intentaban llevar la manija del choque, pero no existía un dominador claro, el juego se desarrollaba en el centro del campo, los intentos de acercamientos eran frustrados por los defensas.
El primer atisbo de ocasión clara era del filial blanco, con un centro de Santos que no llegaba por centímetros Latasa, que pocos minutos después se retiraba del terreno de juego lesionado.
Tras lo visto en los minutos anteriores, solo un error en la defensa generaría una oportunidad clara, y así fue, en el minuto treinta y dos un saque fallido de Luis era aprovechado por Carbiá para disparar pero el meta madridista se resarcía del error y mandaba el cuero a córner.
Tras esto, los locales iban a reaccionar y dispondrían de las ocasiones más claras en lo que restaba de primera parte. La primera con un disparo de Morante que se marchaba alto.
Una jugada individual de Marvin finalizaba con un centro al área, Aranda estaba atento y cabeceaba el cuero batiendo al meta del Nástic y establecía el primer gol de la calurosa mañana. La última oportunidad iba a ser local con un remate de Gudjohnsen que se estrellaba contra la defensa visitante.
En el arranque de la segunda mitad llegaba la polémica al Di Stéfano, Bonilla lanzaba un córner que despejaba de puños Luis, pero el primer linier decretaba que el cuero había entrado y empataba el partido.

Tras este batacazo, el filial blanco no se iba a venir abajo, primero Marvin lo intentaba con un disparo lejano que se marchaba alto. Dos minutos después, llegaba el júbilo al campo. Una contra liderada por Peter, le dejaba el cuero a Aranda que, con una gran tranquilidad controlaba el balón, y con un disparo cruzado batía al meta visitante y adelantaba de nuevo al cuadro blanco.
El mismo protagonista, tenía en sus botas el tercer gol de su cuenta, pero su remate se marchaba desviado. Gila cabeceaba un centro que se marchaba desviado. Santos estaba cerca de aumentar la ventaja para su equipo con una jugada individual, pero el disparo se marchaba lejos de la meta visitante.
Las siguientes oportunidades iban a ser del Nástic. La primera con una volea de Pol desde la frontal que se marchaba cerca del larguero. Tres minutos después el mismo protagonista tenía el empate en su cabeza pero el testarazo era repelido con una gran estirada de Luis. El tercer intento lo despejaba la defensa blanca en el área pequeña.
En los últimos instantes, Peter tendría la sentencia en sus botas, pero su disparo se marchaba rozando el larguero. La última oportunidad iba a ser del Nástic pero su remate se marchaba desviado.