RAYO MAJADAHONDA 1-2 TALAVERA | Merecida derrota

El colegiado pitó el inicio de este encuentro, de la jornada 31, Grupo I, de la Primera RFEF., que se disputaría en el Campo Municipal del Cerro del Espino, poniendo la pelota en movimiento Rodrigo Rodrigues, para perderla a continuación y llevársela el conjunto  majariego, que por medio de Rubén Sánchez se incursionaría en el área contraria por la izquierda, para centrar antes de llegar al fondo, y allí se encontraba,  en boca de gol, y libre de marcaje,  Borja González que no acertó a rematar, desperdiciando una de las pocas ocasiones de gol, que tendrían los discípulos de Abel Gómez en la primera parte.

Poco a poco los de Talavera de la Reina se fueron haciendo con la posesión de la pelota, sumándose continuamente al ataque, para obligar al Rayo a replegarse en su campo, a defenderse de los ataques de sus rivales.

Tras alguna falta y algún que otro córner a favor de los toledanos, llego el minuto catorce, cuando tras un córner botado por el Rayo Majadahonda, se quedaba con el esférico Edu Sousa, que sacaba en largo hacia la derecha del ataque de su equipo, allí se encontraba Rodrigo Rodrigues,  que controló y  bajo la pelota, y cuando vio que el portero local, Nereo Champagne, salía de su portería para tapar hueco, le driblo, y sin apenas ángulo se sacó un zapatazo con la bota derecha, que se colaba irremisiblemente entre los tres palos, 0-1, en una formidable jugada del centrocampista castellano-manchego, que culminó con un golazo.

El equipo talavereño muy metido en el partido, y el gol les espoleo todavía más, mientras que el Majadahonda estaba a verlas venir, y daba la sensación de que aún no habían salido de los vestuarios.

La hinchada talabricense marcaba la diferencia con sus canticos de ánimo, mientras que la majariega, apenas aparecía en el Cerro. La pelota deambulaba por el campo de hierba, pero casi siempre de las botas visitantes.

En el minuto treinta y dos, el Tala sacaría de banda, el cuero llegaba al centro del área, allí la defensa local estaba muy relajada, y  finalmente despejaba hacia el borde del área, justamente donde estaba desmarcado Vicente, que de duro disparo con la bota zurda colocaría la pelota al lado del poste derecho de la portería defendida por Nereo Champagne, que no pudo hacer nada, solo sacar,  instantes después,  el balón del fondo de la portería, 0-2, un resultado justo por lo que por lo que se estaba viendo en Majadahonda en esta media hora, en este tiempo los foráneos estaban enchufadisimos, y  los locales sin embargo , por las fechas en las que estamos, llevaban la torrija puesta.

Los discípulos de Manuel Mosquera no bajaban el ritmo a pesar de marcar distancia con sus contrarios, y querían sentenciar el partido, querían el tercer gol, que estaba mas cerca que el primero del Rayo.

El Rayo Majadahonda empezaba a intentar algo, y al menos ponían más voluntad y se acercaban a los dominios de Edu Sousa, pero sin crear ocasiones de gol. Mario tuvo su oportunidad, pero paró Edu  su disparo, señalando además falta el colegiado. También probó fortuna Néstor Albiach de disparo lejano, que salió por la línea de fondo rozando el poste.

Y así con mas pena que gloria para los locales, el Sr. Sánchez Villalobos mandó a los jugadores a los vestuarios, y a los espectadores a darse una vuelta por el campo, dado que no hay una cafetería o bar, donde poder tomar algo, solamente un pequeño kiosco muy limitado, y como sugerencia no estaría mal contemplar el poner  una cafetería para uso público para la próxima temporada, al igual que la que tiene el Club para uso propio.

Con dos cambios en el Rayo Majadahonda, se  inició  la segunda mitad, pasando Borja González a desempeñar funciones de defensa central, y pudimos observar a un equipo local al que probablemente  le habían leído la cartilla, pues desde el principio salieron a buscar algo positivo, como el remate de Philip Osei en el minuto cuarenta y seis que salió por poco.  A continuación, remate del defensa central del Talavera que detiene Nereo Champagne.

Los majariegos habían cambiado su actitud en la reanudación, estaban más activos, más pendientes de las marcas, y con ganas de agradar a sus  aficionados, a los que les habían dejado una mala sensación anteriormente. En el minuto cincuenta y cuatro, gol anulado a Rubén Sánchez por fuera de juego, cuando la afición local celebraba el gol. A continuación, Nando dispararía a puerta, repeliendo la defensa talaverana. A los locales se les notaba mas entonados, y los visitantes estaban capeando el temporal, en espera de tiempos mejores.

Poco después, y tras un saque de banda desde la izquierda, el cuero llegaba al área talaverana, y los centrales alejan el balón de sus inmediaciones, pero salía a la derecha del área, donde lo recogía  Tropi,  que de duro golpeo con pierna zurda viniendo desde atrás, conseguía empalar la pelota e introducirla en la portería defendida por Edu Sousa, 1-2, con mucho tiempo por delante para lograr al menos la igualada, y así lo celebraba la afición rayista.

El Talavera no se amilanaba, y en una buena jugada trenzada entre su media y sus delanteros, se plantaban en el área contraria, despejando Borja González a saque de esquina. El córner lo boto Víctor Ruiz a la cabeza de Añon, que mar-o el gol, al enviar el cuero por encima del larguero.

Poco después, jugada que propició el mejor de su equipo, Mawi, tras un envío de Nando, y el pequeño jugador majariego solo delante de Edu Sousa pegaba un trallazo importante, para que el meta toledano despejase con la cara, en una clarísima ocasión de igualar el marcador, pero no pudo ser.

El Talavera quería su tercer gol, el de la tranquilidad, y lo perseguía Rodrigues, que  remató a puerta fortísimo, para que un defensor concediera córner. El Rayo Majadahonda a punto de igualar, remate de Borja González, que sacaba debajo de los palos el central visitante Tomy,

Esta segunda parte estaba siendo muy movida, y en general ambos conjuntos nos estaban mostrando un buen juego, en un interesante encuentro, con idas y venidas a ambas áreas. En el turno de los castellanomanchegos, Pablo Monroy, que a pesar de estar acosado por Philip Osei, conseguía rematar a puerta, escapándosele la pelota por encima del travesaño.

El cronometro impasiblemente consumía los minutos, y se acercaba al noventa, y apareció en escena Edmilson que a base de coraje se aproximó a la meta de Nereo, pero no pudo progresar porque se lo impidió Góngora.

Y el colegiado, tras el añadido, pito el final del partido, ante el delirio de la afición talaverana, pues su equipo se lleva tres puntos muy valiosos, que le servirán de mucho en su lucha por eludir el descenso, mientras que el Rayo Majadahonda pone un borrón en su pelea por conseguir algo positivo que le permita pensar en metas más altas