PARACUELLOS 3-3 F. PROMESAS | El Paracuellos deja escapar tres ventajas y aplaza el ascenso de su vecino

Goles son amores, menos para los entrenadores. O, si no, que se lo digan a Manu Alcázar, que vio cómo su equipo se dejó empatar tres veces para acabar 3-3 frente a un Fuenlabrada Promesas que lo pudo ganar como también lo pudo perder. Javi Fer, Cortés y Álvaro Merencio situaron al filial majariego por tres veces en ventaja, pero Ivi, Kevin Manzano y Valverde restacaron un punto que aplaza el ascenso del Atlético de Madrid B. Con un empate mañana ante el Alcorcón B, los rojiblancos serán de Segunda RFEF.

El encuentro puede repetirse en sensiblemente un mes, ya en el play-off, pero para ello el Paracuellos deberá mantener, al menos, la quinta posición que actualmente ocupa, si bien la puede perder durante este fin de semana. El conjunto local sabía de la importancia del partido, más si cabe visitando el Jueves Santo a un rival que pelea por la permanencia como el Parla. A los siete minutos, el pase de Álvaro Merencio llegó con algo de fortuna hacia Javi Fer, que se movió bien para batir a Roberto y anotar el primero de la mañana.

Un Merencio que volvió a ser uno de los hombres del encuentro en el Paracuellos Antamira. A su asistencia en el minuto 7 le pudo seguir un golazo desde fuera del área en el 8, pero el travesaño se lo negó. La respuesta del Fuenla Promesas fue letal y con una cierta relajación defensiva majariega. El libre lateral de Ivo Carosini buscó la testa de Dago, que prolongó, y la segunda acción, también dentro del área, la ganó Ivi, que se benefició de un mal despeje de Nabil para equilibrar el marcador.

El partido estaba entretenido, con acercamientos, aunque con mayor claridad del lado local, para el que desempeñó un papel fundamental Javi Fer, ganando muchos duelos por alto y nunca dando una pelota por perdida. Los azulones, por su parte, hacían daño en situaciones de estrategia, donde la defensa del Paracuellos sintió dificultades. De hecho, los fuenlabreños reclamaron gol en el cuarto de hora. Sería, de nuevo, de Ivi en otro servicio lateral, aunque el árbitro, Sánchez Jiménez, indicó una infracción en el área pequeña.

Un colegiado que fue, de alguna manera, responsable de que el partido entrara en una fase de mucha interrupción por faltas y, también, de protestas, sobre todo del filial majariego. Los parones derivaron en ausencia de peligro junto a las porterías y en imprecisiones hasta que Álvaro Expósito colocó un pase magnífico para Facu Esnaider, que, escorado, tocó atrás con gran criterio para la llegada de Cortés. A placer, el ’21’ no perdonó y volvía a colocar por delante al Paracuellos, aunque con algunas quejas de Ivo Carosini al asistente por un posible fuera de juego de Esnaider.

Sin embargo, no le duró mucho la alegría a los de Manu Alcázar, pillados al contragolpe dentro del primer minuto de los dos del tiempo añadido. De una acción que podía ser de peligro para el 3-1, con Cortés y Merencio, se pasó al 2-2, porque el pase del primero hacia el segundo no resultó y, en la respuesta inmediata, Valverde, Dago y Kevin pudieron con una despoblada zaga majariega. El primero centró al corazón del área, el segundo la dejó pasar para permitir al tercero, Kevin Manzano, rematar a bocajarro y sin mayor oposición que la de Diego Moreno, a quien superó por bajo. 2-2 a vestuarios.

Era un golpe duro para el Paracuellos Antamira, del que pareció que no se repuso en los primeros compases de la reanudación. Eso sí, el Fuenla perdonó el 2-3, porque, en la misma situación que Facu en el 2-1, Valverde optó por decidir en solitario en vez de asistir a Dago, solo para empujar. El tiro del ecuatoriano no cogió portería, al igual que el posterior de Kevin. Sí lo hizo el de Álvaro Merencio en el primer intento local tras el descanso. No pareció un disparo, la posición tampoco era propicia para ello, pero entró y valió igualmente en una acción en la que Roberto, sorprendido por la ejecución del ’11’, posiblemente pudo hacer más.

Como tampoco salió del todo bien en la fotografía la defensa del Paracuellos en el 3-3, apenas un minuto después. Dejó espacio por dentro y lo aprovechó Ivi para asistir a Valverde con un gran pase. El ex del Torrejón cruzó su remate para restablecer la igualada por tercera vez en el encuentro. Eran seis goles en algo menos de una hora de juego y el 5-4 del Las Rozas – Alcalá podía verse amenazado, pero ya no se alteró más el marcador pese a la mayor iniciativa con el esférico de un Paracuellos que lo buscó más, aunque sin una oportunidad de verdadero peligro.

Sin Cañizares y Solomon Gyesi, ambos ausentes por lesión, el primero de ellos en el peroné y de gravedad, a Manu Alcázar no le quedaban muchas alternativas de ataque, y es que le faltó frescura mental y física al Paracuellos en las postrimerías para haber traducido en ocasiones su mayor dominio. Curiosamente, soluciones ofensivas tampoco tenía Sebas Martínez de Pinillos en el banquillo, por la habitual presencia de Amigo con el primer equipo, además de la sanción de De Loma o las bajas de Blanco y Sopale, que vieron el encuentro desde la barrera. Así pues, el entrenador peruano solo realizó una sustitución, la entrada de Moha para refrescar el mediocampo.

Pareció terminar más entero el Fuenlabrada Promesas, que mantuvo la triple amenaza (Kevin, Valverde y Dago) hasta el final sobre el verde y le pudo causar un disgusto a su rival. Sin embargo, Dago remató en el minuto 82 a los dominios de Diego Moreno tras el toque de espuela de Kevin. Y, en el 88, Valverde malogró una gran ocasión al no poder castigar con el 3-4 una pérdida de Tijan en una zona muy comprometida. Lo pudo ganar cualquiera, pero el partido acabó con tablas.