a Rey muerto, Rey puesto. Menos de cuarenta y ocho horas ha durado libre el banquillo roceño. Su nuevo inquilino es Manolo Cano, que llega a Navacarbón acompañado de su equipo técnico: Javier Pardo, Aitor Maiztegui y Manolo Rueda. Del cuerpo técnico anterior, el único que permanece es Del Estal, que seguirá siendo el preparador de porteros.
Manolo Cano llega al banquillo azulón, tras poco más de un año sin dirigir. Su último equipo fue el Sanse, en Noviembre del pasado año, tras la jornada once. Un malísimo inicio de temporada acabó con su periplo en Matapiñonera, en donde estuvo la temporada anterior cuajando un gran curso. A la entidad sansera llegó procedente del Atlético de Madrid Juvenil, con el que logró ser campeón de España. Anteriormente, dirigió a Deportivo Guadalajara y Colonia Ofigevi.
Pero sin lugar a dudas, su etapa más extensa y gloriosa fue junto con Juan Antonio Anquela, que curiosamente esta misma semana ha vuelto también a los banquillos, tras ser destituido también en las mismas fechas el curso anterior. Junto con el técnico jienense estuvo durante ocho temporadas como segundo entrenador, en los banquillos de Alcorcón, Numancia y Granada.
Ahora afronta por primera vez el reto de coger un equipo con la temporada empezada, con la difícil misión de lograr la permanencia en la que será la Segunda RFEF, en la que será más difícil que nunca salvarse.