Foto: Internacional de Madrid
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cuando las circunstancias no acompañan conviene no perder. Si encima ganas, miel sobre hojuelas. Porque en el partido de Boadilla jugar era complicado o muy complicado. El enemigo: un viento «hombrón» de Lorca persiguió a ambos complicando sobremanera manejar el cuero. Insoportable por momentos, combinar con él a favor era un ejercicio de matemáticas avanzado; en contra un acto de fe para precisar. Ante esa tesitura el Inter aplicó lo que le está convirtiendo en un equipo solvente: pacienda.

Como si fuera un panadero preparando un pedido real, Marcos preparó el partido para que no hubiera concesiones. Estaba claro que con el aquilón que nos arengó primaba no cometer errores. Que se sepa de antemano no significa que todos sean capaces de aprovechar la coyuntura. Así que el Inter durante la primera mitad tuvo la pelota, con criterio claro: no perderla. Claro que se exponía poco, tampoco se podía hacer gran cosa, en medio campo para evitar que los asturianos pudieran desenvolverse a la contra. Mucha jugada a balón parado, mucho trabajo, mucho esfuerzo por parte de ambos y una imposibilidad casi absoluta de concertar pases.

Todo ello nos deparó una primera mitad espesa, muy disputada, de sudor. Propia de la categoría cuando los emolumentos no te llegan (como es el caso de ambos) para traer goleadores capaces de desatrancar un partido con un chispazo. Como el Baleares, pongamos por caso. Así que tirios y troyanos se aplicaron a no perder la compostura para no verse sorprendidos.

El Inter tenía el aire en contra en la segunda mitad. Le sentó mejor. Aunque al inicio del mismo eran los asturianos los que más promovieron la fractura del marcador. Ramiro tras un barullo en el área local tuvo la mejor ocasión hasta la fecha pero se topó con Felipe, un hombre acostumbrado a parar poco, pero parar. Detalle no menor. Fue un espejismo porque enseguida entre Chevi y Del Pozo recuperaron el control para evitar una anarquía que no quería nadie.

Era cuestión de no conceder, recuerdan; y de aprovechar si el contrario se despista. Un balón colgado al área toca Aythami y Herrero llega libre de marca para fusilar a Adrián. El mismo que empezó la jugada, la acabó. Cuando menos se puede calificar de extraña, pero…. Gol y el Inter por delante. Con marcador en contra se aturulló el Langreo; lo entendieron los rojinegros que liquidaron el partido. Tras una falta lateral a favor de los asturianos llegó una contra letal que resolvió Aythami.

Patadón de Chevi que no acierta a despejar la defensa visitante, el balón le llega a Del Pozo que pone para la carrera de Aythami; el ariete se va por velocidad y por fuerza para plantarse ante el portero rival y liquidar el partido. Porque a partir de ahí fue un quiero y no puedo de los visitantes que mostraron lo mucho que van a sufrir para salvar la categoría. El inter no se desnudó, guardó la ropa consciente que no tenía ya nada que exponer (y menos con un huracán en contra), dejó correr los minutos y halló el merecido premio del tercero cuando el final del partido asomaba en el horizonte.

INTERNACIONAL Felipe Ramos; Gallardo, Moyano, Llerena; Mancebo, Del Pozo, Chevi (Bonaldo 80´), Junior (Nouman 69´); Rubén Ramos y Aythami (Rufo 58´).
LANGREO
Adrián, Cristian, Alaín, Alain, Gayoso (Abel 72′), Mateo, Lavsamba (AA 85´); Pedro (A) (Leto 61′), Jordi (Asier 61´), Davo; y Nierga
GOLES 1-0 Alvar Herrero (53′); 2-0 Aythami (57′); 3-0 Rufo (88′).
ÁRBITRO Eiriz Mata, colegio gallego.
INCIDENCIAS Ángel Nieto, unos 200 espectadores.
Los Importantes 2019/2020
INTERNACIONAL

3. 3.
2. Chevi 2.
1. Rubén Ramos 1.
E: Marcos Jiménez 2 E:
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