INTERNACIONAL 2-2 CELTA B | Una victoria se desliza entre los dedos

el partido tuvo el ritmo del mes de octubre y el calor sofocante de agosto. El Internacional de Madrid se puso el mono de competición, a pesar de los cambios en la plantilla, se asomó al Angel Nieto con un estilo de juego reconocido. En un partido abierto, el resultado siempre fue incierto. El Celta “B” respondió al cara a cara, los goles se sucedieron golpe a golpe; primero anotando el “Inter”, a continuación, equilibrando el marcador el filial celeste. Con 2-2, los visitantes demostraron más oxígeno en sus piernas, pero los locales tiraron de experiencia para mantener el resultado. La polémica también apareció en escena, pero ambos se llevan un punto de botín en la fiesta de apertura.

Los de Boadilla demostraron desde el comienzo que ya no son unos imberbes en Segunda “B”. A los seis minutos aprovecharon una internada por la banda derecha para no perdonar desde dentro del área. Rubén Ramos, un consumado jugador de Segunda “B” se encargó de adelantar a su equipo, 1-0.

Sin embargo, el Celta “B” marcó la hoja de ruta, la segunda “B” es una categoría dónde el cuento tiene un final feliz si dominas lo que sucede en las áreas. Cinco minutos después del primer gol, Apeh aprovechó un pase en profundidad para proteger el balón, ni Moyano ni Llerena pudieron tumbarlo y él consiguió batir a Felipe Ramos, 1-1.

Con el empate en el marcador, ambos equipos se desplegaron, espacios para atacar, pero defensas bien plantadas. Aun así, Nouman, procedente del Villaverde San Andrés, sacó su capacidad de slalom para percutir por la banda derecha y poner un centro que Rufo cabeceó por encima del larguero. El filial vigués, avisó al Internacional, una buena presión le permitió a Veiga finalizar un contraataque pero su tiro se marcharía desviado.

Parecía que el descanso llegaría sin sobresaltos, entonces apareció Rufo. El “9” interista había estado moviéndose todo el primer acto pero sin encontrar caramelos. Rubén Ramos le puso un dulce pase al espacio y el delantero, voraz, engatilló de tiro cruzado para poner el 2-1. Corría el minuto 44 de juego y en el Internacional de Madrid se las prometían felices antes del descanso. Sin embargo, Felipe Ramos, su guardameta, no perdió de vista al ataque del Celta “B” y de preciosa estirada salvó un certero remate de cabeza de Solis.

En el segundo tiempo, parecía que el Internacional de Madrid había encontrado la llave del partido; combinar, llevar el balón a banda y encontrar a Rubén Ramos entre líneas. Sin embargo, con el paso de los minutos, los locales se fueron quedando sin combustible y el filial celeste, entre la frescura aportada por las sustituciones y los cambios tácticos, fueron conquistando palmos de terreno. Así hasta que en el minuto 71 llegaría el empate; fruto de un saque de esquina, Felipe Ramos sacó el primer remate pero no puedo frenar a Molina que en boca de gol anotó el tanto que suponía el empate a dos.

A partir de ese momento, el Celta “B” creyó en la victoria, se apoderó del balón pero en el Internacional de Madrid brotó el oficio. La polémica también asomó y lo hizo en ambas áreas. Primero en la del equipo de Boadilla, un dudoso penalti dónde el defensor local llegó tarde al remate de un delantero vigués. A continuación, las dudas viajaron al área del Celta “B” por unas presuntas manos en el área. Sin embargo, quién más cerca estuvo de cambiar el signo del partido fue el capitán celeste que cabeceó fuera un saque de esquina lanzado con precisión.

Empate justo en un buen partido, entre dos equipos que demostraron humilde y carácter, preparados para afrontar los siguientes 37 duelos para alcanzar la permanencia.