CORUXO 2-0 SANSE | Irureta no fue suficiente

el Sanse llegaba a Galicia en un partido de necesidad extrema. Las dos últimas victorias de los madrileños tanto en Copa ante el Córdoba, como en casa ante el Pontevedra les habían dado alas para acercarse al objetivo de la salvación. Salir del pozo era una necesidad para los visitantes, mientras que los locales intentaban apurar sus opciones para acercarse a la promoción de ascenso.

En los primeros minutos, el Coruxo salió muy activo al campo. Es por eso que, tras una la pared fantástica entre Mateo y David Añón llegaría el primero gol de los locales en el tercer minuto de partido.

Todo el peligro del Sanse llegaba con centros desde la banda izquierda por parte de Pipe a Joel, que no cesó en su pelea continua contra los centrales del equipo gallego para buscar un remate franco. Tras ponerse por detrás en el marcador, los madrileños intentaban hacerse con el balón y llegar con paciencia al área para generar peligro. En el 24´, vimos un bonito intercambio de golpes en el que los porteros de ambos equipos se lucieron con dos grandes paradas ante los atacantes rivales. En el 32´, de nuevo los locales pudieron aumentar la distancia tras una ocasión clara de Silva que desperdició delante del portero. Tan solo tres minutos antes, el Sanse la había tenido con un remate de cabeza de Joel en el punto de penalti que se iba fuera.

La mayor diferencia entre ambos equipos se veía en la defensa. Mientras que los centrales del Coruxo no dejaban a Joel rematar con claridad, la inseguridad defensiva del Sanse había podido dejar prácticamente sentenciado el partido en la primera mitad con ocasiones claras que los locales perdonaron ante un gran Irureta.

La segunda parte comenzó como la primera, tras un balón largo de Crespo, Mateo enviaba el balón al larguero. El Sanse atacaba, pero la sensación era que el gol de los locales estaba más cerca que el de los visitantes. Los madrileños dominaban, pero los gallegos a la contra generaban una sensación de peligro constante. Irureta mantenía vivo al Sanse.

Se podía intuir lo que acabaría pasando y el Coruxo avisó con un remate de Añón que pudo ser el gol de la jornada. En la siguiente jugada Mateo cabalgaba la banda, Irureta la sacaba y en el rechace de cabeza Alex Ares marcaba el segundo para los gallegos.

Ni siquiera Fer Ruiz, tras una buena anticipación, pudo acercar a los madrileños en el marcador tras estrellar su vaselina en el larguero. Además, el Sanse acabaría el partido con un hombre menos tras la expulsión de Kosut y aguantó el final del partido metido en su área.

Los madrileños sacaron pecho e hicieron un partido más que digno, pero no fue suficiente para continuar su buena racha y quedan condenados a una última posición de la que parece difícil salir.