AVILÉS 0-1 MÓSTOLES | Asturias para olvidar las penas

catorce jornadas y catorce onces distintos por parte avilesina, aunque en esta ocasión con tan solo dos cambios respecto al equipo que cayó en Santiago. Mismo número de variaciones en un Móstoles dos puntos por debajo, que también llegaba con dos derrotas seguidas, por la mínima en sendos derbis madrileños ante Adarve y Navalcarnero.

Comenzó con fuerza el Avilés, forzando saques de esquina y buscando la portería con lanzamientos al borde del área como el de Vidorreta -que volvió a su puesto natural en el once tras cumplir sanción- a los 6 minutos. El Móstoles no se arrugó y dio la réplica al cuarto de hora, en un saque de falta desde la derecha que logró desviar Sanjurjo, impactando en el lateral de la red.

Los atacantes locales trataron de intercambiar posiciones para sorprender a un rival bien replegado, encontrando sus mejores minutos con Iago Díaz en la izquierda y Sergio García en la derecha. El zamorano remató en posición difícil a los 28 minutos un servicio de Hualde desde la izquierda, intentándolo poco después el lucense con un disparo desde la esquina izquierda del área que le acabó generando más problemas de los esperados a Tejero.

Pero las mejores ocasiones de la primera mitad se hicieron de rogar hasta los últimos cinco minutos y llegaron del lado visitante. Primero Irizo filtró un balón para Portilla, que en posición dudosa ganó la espalda a su marcador errando en la definición; posteriormente se intercambiaron los papeles, sirviendo Portilla desde la izquierda tras una indecisión de la zaga avilesina y rematando defectuosamente Irizo en el área pequeña con todo a favor.

El equipo azulón, hoy de rojo, siguió probando fortuna al inicio de la segunda parte, con un disparo a la media vuelta de Sanjurjo y un balón de Portilla que impactó en el poste y se paseó con suspense sobre la línea de gol a los 60 minutos.

Dos minutos después los madrileños deshicieron finalmente la igualada, tras una jugada personal del canterano Toni, que irrumpió en el área tras un saque de esquina, eludiendo con calidad a varios defensores y batiendo a Mario de Luis con un disparo fuerte y raso con la zurda.

Golpe duro para un Avilés que tardó en poner en aprietos a la defensa mostoleña, cuyo principal sobresalto fue el golpe sufrido por Mantovani en la boca del estómago, que le provocó una momentánea pérdida de aire y conocimiento. Tras unos momentos de duda, el jugador fue trasladado en ambulancia al Hospital San Agustín, donde se le realizaron las pruebas pertinentes, pudiendo emprender el viaje de vuelta con sus compañeros sin complicaciones.

Pasado el susto, el Avilés recuperó el pulso y tuvo su momento, coincidiendo con la entrada de Perea y sobre todo de Cedrick. De las botas del congoleño nacieron las mejores opciones avilesinas, con mención especial para un disparo de Ródenas en el 77, bien despejado por Tejero.

El propio Ródenas tuvo la última al borde del 90, cabeceando una falta botada desde la derecha, pero los de Chiqui de Paz no lograron embotellar a un rival que sólo realizó dos cambios pero que supo manejarse en los cinco minutos de descuento. Al final tímidos pitos y fría despedida para los cariacontecidos jugadores locales, mientras los mostoleños celebraban su valioso triunfo con los pocos pero animosos aficionados desplazados.

La próxima cita para el Avilés será en Butarque, ante el Leganés “B”, el domingo a partir de las 18:15 horas. Oportunidad para remontar el vuelo antes de afrontar el último partido del año ante el Bergantiños, que en principio se disputará el sábado 18 a partir de las 6 de la tarde en el Suárez Puerta.