un Alcalá-Torrejón siempre es un partido especial, con muchas connotaciones. Sin la carga emotiva de sus dos duelos del pasado curso, pero igualmente especial, sobre todo al tratarse del primer partido de la temporada. Se esperaba mucho del duelo de eternos rivales, que sin embargo no ofrecieron un buen espectáculo. El fútbol brilló por su ausencia, disputando un partido muy trabado, en el que a los dos equipos les costaba elaborar.
Sorprendió Joselu con una apuesta valiente desde el inicio. A pesar de que dos de sus hombres con más calidad como Cabo y Fran partieron de inicio desde el banquillo, el mito rojillo apostó por un 4-3-3 en el regreso a la que siempre será su casa. Y sobre todo, sin complejos, yendo a presionar arriba al rival, jugando en campo contrario, sin meterse atrás como muchos podían esperar. Enfrente, Jorge Martín de San Pablo retornó al 4-1-3-2 de la mayor parte de la temporada, con Pancorbo de delantero por la ausencia de Pradillos por sanción.
Pero como decimos, el partido no tuvo mucho fútbol. A los dos equipos les costaba retener el balón, y sobre todo moverlo con criterio. A los dos les costaba mucho jugar, y enlazar una jugada de más de tres pases. El choque tenía muchas interrupciones, ayudado en parte por el colegiado, que solía pitar falta en la mayoría de las fricciones (y había muchas) entre ambos equipos. El juego no tenía nada de continuidad, por lo que no se hace difícil adivinar que las ocasiones brillaban por su ausencia. Las llegadas al área rival eran a cuenta gotas, sin tener que esforzarse mucho ninguno de los dos porteros para repeler el poco peligro que se creaba en torno a sus porterías.
En la segunda mitad el partido mejoró. De inicio el Alcalá comenzó más enchufado, dando una versión más parecida a lo que quiere ser esta temporada. Es más, los complutenses tuvieron una oportunidad de lujo para adelantarse en el marcador, tras un penalti por mano de Mario en el rechace de un córner. Sin embargo, el especialista rojillo, Nanclares, marró su primera pena máxima desde que viste los colores del Alcalá, enviando el balón extrañamente a las nubes.
El fallo del penalti pareció un golpe anímico muy duro para los alcalaínos. Tras el fallo del vallecano, el partido se volvió a equilibrar, y volvió a perderse en guerras de guerrillas que no conducían a nada. Y dentro de ese escenario, parecía encontrarse más cómodo el cuadro torrejonero, que obligó a Aarón a lucirse por dos veces mediado el primer tiempo. Primero en un mano a mano de Valverde del que salió victorioso el meta; y un par de minutos después, metiendo una gran mano a bajo a disparo desde la frontal de Fran Sánchez.
Pero cuando mejor parecía que se encontraba el Torrejón, se adelantaron los locales en el marcador. Nanclares se desquitó del fallo del penalti, con un auténtico golazo. El diez rojillo recibió en la frontal del área se fue de su par, se acomodó el esférico, y lo clavó en la escuadra sin que nada pudiera hacer Nacho por evitarlo. Además, las cosas se le iban a poner mucho mejor a los cervantinos, pues un minuto después Dani veía una roja directa rigurosa, por una fea entrada (aunque pareció desintencionada) sobre el mencionado Nanclares.
Con diez hombres sobre el irregular césped de El Val, Joselu recompuso de inicio a los suyos, conservando la línea de cuatro atrás, pasando Fran Sánchez al lateral izquierdo. Aunque esa apuesta duró poco, puesto que pocos minutos después, tras introducir un doble cambio, planteó tres líneas de tres, sabiéndose sin nada que perder ya.
Y le salió bien la apuesta al técnico alcarreño, puesto que un minuto después veía como los suyos lograban igualar. Tras un córner, decretó de nuevo los once metros en una extraña jugada, en la que los jugadores de ambos equipos se quedaron callados. Pero tras deliberar durante un par de segundos, pitó penalti por mano del capitán local Benítez, que no pareció. Desde el punto fatídico, Heras no falló, engañando a Aarón, reestableciendo la igualada.
De nuevo con el partido equilibrado, se esperaba una reacción en tromba de los cervantinos que no llegó. Con más corazón que fútbol, los acelerados jugadores rojillos trataban a la desesperada de evitar que no volaran los dos primeros puntos de la temporada en El Val, sin éxito. Los pupilos de Jorge Martín de San Pablo, no solo es que no lograran crear peligro, sino que vieron como a la contra el Torrejón pudo por dos veces llevarse la victoria. Primero Diego, y luego Chino ya en tiempo de prolongación, tuvieron dos mano a mano en los que volvió a salir victorioso Aarón, que de este modo pareció ganarse el puesto como heredero de Juancho.
En definitiva, un punto para cada equipo en un nuevo derby del Henares, que al contrario de lo que pasó en los del curso pasado, no pasará a la historia; y a buen seguro no quedará en la memoria de los allí presentes, salvo por ser el primer partido con público tras la pandemia, con grandes medidas de seguridad.
ALCALÁ | Aarón; Huelves, Rafael (A), Benítez (A), Adri (A) (Durán 69’); Gonzalo Rodríguez; Izan (A) (Sergio Jerez 81’), Maikel (Malote 69’) (A), Shafa (A) (Alamancos 81’); Nanclares (Hervías 90’) y Pancorbo. |
TORREJÓN |
Nacho Esteban; Fredi (Chino 78’), Palero (A), Álvaro (A), Dani (R 73’); Pablo Rojo (A), Rubén (Adrián 78’), Heras; Mario (A) (Fran Sánchez 55’), Valverde y Diego (Óscar Cabo 92’). |
GOLES | 1-0 Nanclares (72’); 1-1 Heras (penalti) (80’). |
ÁRBITRO | Clavería García (0). Amonestó al segundo entrenador visitante, Alberto Pérez. |
INCIDENCIAS | Municipal del Val, 450 espectadores. |
Los Importantes 2020/2021 | |||||
ALCALÁ |
TORREJÓN |
||||
3. | – | 3. | – | ||
2. | – | 2. | – | ||
1. | Aarón | 1. | Diego | ||
E: | Jorge Martín de San Pablo | 1 | E: | Joselu | 1 |