Publicidad

dice el siempre sabio refranero español “lo que mal empieza, mal acaba”. Y caprichos del fútbol, en esta ocasión se puede aplicar a los dos equipos. Mal acabó para el Galapagar, que a buen seguro habría firmado el empate sobre el papel (y más teniendo en cuenta la previa del choque), porque vio como en el minuto 96 se le iban dos puntos. Y mal acabó para el Alcalá, que una vez concluido el partido, como como el controvertido Muñoz Moreno expulsaba con roja directa a Huelves y Alan por reiterar en las protestas.

La tarde comenzó torcida, sobre todo para el Galapagar. Un importante atasco retuvo a la mayor parte de la expedición (también llegó tarde el árbitro asistente uno por el mismo motivo), la cual pisó el Municipal del Val pasadas las cuatro de la tarde, estando programado inicialmente el partido para y cuarto. Debido a que el Galapagar no tenía efectivos suficientes para afrontar el partido, el árbitro instó a los delegados que el partido empezaría a y media, una vez que habían llegado los jugadores visitantes. Con el tiempo justo para calentar, sin la charla técnica previa al partido y cambiándose sobre el césped afrontaron los gualdinegros el partido. La cara de Álvaro Gómez Rey, que sí había llegado antes al choque, lo decía todo.

Pintaba es bastos para el Galapagar, que además nada más empezar vio como Ponce rozaba el gol tras una gran jugada individual de Alan. Todo parecían malos presagios para el cuadro serrano, que sin embargo se reveló contra el que parecía su destino, y rápidamente se adelantó en el marcador. Tras un saque de banda, en una jugada de pizarra con dos toques en corto, se adelantaron los galapagareños, gracias a un cabezazo de Pliego, que remató en el segundo palo.

Desde ese momento, la cara de Álvaro Gómez Rey mutó de poema a una gran sonrisa que se mantuvo hasta el tiempo de prolongación. Todo ello a pesar de que el gol fue la chispa que necesitó el Alcalá para despertar y hacerse con el control del balón. Aunque los visitantes no renunciaban al balón ni a su filosofía (tuvieron un par de sustos que no fueron gol por centímetros por sacar el balón desde el interior del área), los locales se hicieron con la posesión del balón y el peso del partido. Los de Jorge Martín de San Pablo mandaban sobre el campo, liderados por un eléctrico Alan que era una pesadilla para la zaga forastera. Pero una vez más, los rojillos pecaron de falta de puntería, echando en falta el tener un nueve puro en el campo, con el que probablemente habrían ganando no solo este partido, sino también el anterior. Y es que los Alan, Malote, Dani Ponce (balón al larguero incluido), las tuvieron prácticamente de todos los colores, rozando el gol por cuestión de centímetros, pero sin hacer intervenir a Gonzalo.

Enfrente Héctor era una pesadilla para los centrales al contragolpe, aunque al verse solo en la mayoría de ocasiones no lograban finalizar jugada los serranos. También le sufrió Degre en su regreso a la portería, en una acción en la que el meta no acertó a despejar en la frontal, teniendo que arrinconar al delantero cerca del córner para evitar que marcara a puerta vacía. Y aunque logró zafarse el pichichi gualdinegro del cancerbero, acabó estrellando el balón en el lateral de la red, en lo que parecía el 0-2 al filo del descanso.

Tras el paso por vestuarios, el avasallamiento rojillo desapareció. Curiosamente, a pesar de que los complutenses tenían más el balón que en el primer tiempo, y de que jugaban más en campo rival. Sin embargo, los de Jorge Martín de San Pablo no eran capaces de crear peligro. Todos sus intentos morían en torno a la frontal del área, ante el buen hacer de la zaga visitante. Una zaga, que además se vio reforzada con un integrante más, al retirar Gómez Rey a Marcos Gil por Raúl León, pasando a jugar con cinco atrás.

La sobrepoblación en torno al área de Gonzalo se les atragantó a los rojillos, que lo veían como un muro infranqueable. Tal era la desesperación alcalaína, no ya por marcar, sino por tratar de hacer daño, que Jorge Martín de San Pablo gritó “línea de cuatro arriba”. Cargando con todo, el frente del ataque lo formaban Sanse y Ponce por dentro, Pablillo e Izan por las bandas, secundados por Alonso de mediapunta y De Pedro incorporado al ataque como un extremo más. Un intento de asedio sin éxito para los cervantinos, que no eran capaces de superar a un Galapagar, al que se veía cómodo a pesar de ser un tipo de partido al que no está acostumbrado. Y es más, a la contra tuvieron los visitantes el segundo. Primero en una vaselina de Héctor, que repelió Degre en dos veces, y poco después con una falta en la frontal que se marchó alto. Por su parte, el asedio cervantino tan solo fructificó en un disparo lejano de Izan que se marchó por poco, y dos remates de Dani Ponce que más de uno celebró antes de tiempo y se quedó a medias. Primero tras un centro de Izan que remató en el área chica con todo prácticamente a placer, pero que se le fue alta. Poco después, tras un buen servicio a balón parado de Alonso, evitando el tanto Gonzalo con una gran parada.

Y cuando todo apuntaba a la segunda derrota consecutiva en casa de los rojillos, volvió a emerger la figura de Izan en el descuento para anotar un gol decisivo. Con los seis de añadido ya cumplidos (el juego estuvo detenido cuatro minutos por atención al visitante Facu que tuvo que abandonar el campo “a la sillita la reina”), Izan se sacó de la chistera un lanzamiento de falta directo desde la frontal del área, que acabó alojándose junto al palo izquierdo de Gonzalo, sin que éste pudiese hacer nada por evitarlo. El cuarto tanto de lanzamiento de falta directo de los rojillos en lo que llevamos de temporada, con el que prácticamente murió el partido. Aunque se jugaron un par de minutos más, nada reseñable ocurrió, muriendo el partido en el que atacaba el Galapagar, a pesar de jugar en inferioridad numérica.

ALCALÁ Degre; Huelves, Murci (A), Luis Enrique, De Pedro (A); Chato; Alan (A) (Pablo Rivero 77’), Ángel (Alonso 69’), Malote (A) (Sanse 77’), Jaime (Izan 63’); y Dani Ponce.
GALAPAGAR
Gonzalo; Íñigo, Gabi (A), Pliego, Guille; Facu (A); Carlos (A) (Yorman 82’), Kike (A) (Jorge 82’), Nacho (Buceta 65’), Marcos Gil (A) (Raúl León 58’); y Héctor (A) (Zamorano 82’).
GOLES 0-1 Pliego (9’); 1-1 Izan (96’).
ÁRBITRO Muñoz Moreno. Expulsó al preparador físico visitante, Javier García Serrano; y a los jugadores locales Huelves y Alan una vez que había finalizado el partido. El choque comenzó con 15’ de retraso debido a que parte de la expedición visitante y el árbitro asistente uno llegaron tarde al haber un gran atasco en la A2.
INCIDENCIAS Municipal del Val, unos 400 espectadores.
Los Importantes 2021/2022
ALCALÁ
GALAPAGAR
3. Izan 3.
2. Alan 2. Héctor
1. De Pedro 1. Pliego
E: Jorge Martín de San Pablo 2 E: Álvaro Gómez Rey 2
Á: Muñoz Moreno 0
Publicidad

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí